martes, 15 de julio de 2008

Más silencio (Buenafuente del Sistal)

De nuevo estoy aquí, en el lugar más silencioso que he conocido jamás.
Sólo el agua del manantial de Buenafuente pone música en medio del silencio. Música o, incluso, más silencio... Porque el fluir constante del agua derramándose en la fuente de piedra acalla el pensamiento bullicioso y aquieta la imaginación (ésa que Santa Teresa llamaba "la loca de la casa").
Durante esta semana, un grupo de más de 70 personas, seglares y religiosos/as, están haciendo un curso de lectio divina, dirigido por Ángel Moreno, sacerdote diocesano, y por Severiano Blanco, misionero claretiano.
Me hubiera gustado participar en este curso, pero no estoy aquí para eso, sino para visitar a las hermanas Cistercienses del Monasterio junto con Lidia, mi compañera orante del blog.
La Madre María, mujer cálida, sencilla, acogedora y maternal donde las haya, nos ha recibido con los brazos abiertos y ha dejado sus muchos quehaceres de la casa, el huerto y la hospedería, para atendernos. Le he pedido permiso para colgar en el blog el reportaje fotográfico del lugar, que hice el año pasado, y me ha dicho que cuelgue algunas fotillos, cosa que haré en cuanto pueda prepararlas.
Puesto que Buenafuente es un espacio para cultivar la oración, la interioridad, gozar del silencio y de la belleza de la creación, y encontrarse con uno mismo, con Dios y con los otros, deseo daroslo a conocer. Es uno de mis pocos lugares favoritos, adonde no me cansaría nunca de volver.
Estoy en la Iglesia del Monasterio. El agua de la fuente sigue cayendo y bañando el Santuario de manera interminable, acompañando mi respiro con el sonido de su danza delicada. El perfume del incienso llega hasta mí y el grupo se ha puesto a cantar un canto de adoración a la Eucaristía, solemnemente expuesta.

Es hora de detener las palabras.
Es hora de adorar.
Es hora de entrar en este silencio regalado y en la Presencia que nos envuelve y nos penetra a todos, como nos baña el agua fresca y cristalina del manantial de Buenafuente.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Shalom!

¡Qué comentarios tan "apetecibles" sobre Buenafuente! A ver si hay suerte y cuando esté allí me encuentro tanto conmigo misma como con Dios, que falta me hace.

Mónica-Yentl

Anónimo dijo...

Querida Yentl, SHALOM!

Me alegra mucho que te hayas decidido a probar, por ti misma, el encanto de Buenafuente del Sistal.
¡Ojalá nos cuentes tu experiencia cuando estés de regreso!
Es tarea pendiente...

Anónimo dijo...

Luisa, acabo de cambiar de lugar el comentario que has dejado aquí sobre la transfiguración a la página donde se encuentra la lectio divina de ese episodio bíblico. Será más fácil de encontrar para quien busque material al respecto.

http://conchipddm.blogspot.com/2008/02/la-transfiguracin-de-jess-mateo-171-9.html

Un saludo